LIMONEROS
Proyecto Arquitectónico: MRD
Equipo: Antonio Morodo Diaz, Sergio Macotela Baca, Pablo Oliva Iruratogoyena, Fernanda Mejia, Diana Perez Limas, Nadia Galvan, J. Alberto Hernández Natividad, Juan Pablo Calzada, Lucia Auman
Estatus: En Construcción
Año: 2019
Proyecto de Paisaje: Taller de Paisaje Entorno
Área Construida: 2,200 m2
Ubicación: Valle de Bravo, Edo. de Méx., México.
Maqueta: TEMAs
Fotografía: Zaickz Moz
Visualizaciones:
Video: Arturo Arrieta
El proyecto esta inspirado en los callejones y paseos más emblemáticos y ricos de arquitectura y tradición en los pueblos mágicos de México. Los limoneros serán parte esencial de recorridos y paisaje en cada rincón.
El sitio alberga maravillosos limoneros y un jardín increíble. Bajo el cuidado de Don Rubén, su dueño, el sitio ha florecido: se ha convertido en un lugar de reunión, donde las familias se reúnen, y la gente realiza actividades recreativas o acude en busca de paz interior. El sitio es un oasis para las personas y un lugar que guarda recuerdos y experiencias de vida imborrables.
La premisa que dio vida a este proyecto fue la idea de entrelazar la historia y los valores del sitio con su contexto. Nos inspiramos en la situación actual del sitio y la arquitectura tradicional mexicana en Pueblos Mágicos, principalmente en Valle de Bravo. Así, pretendemos recrear la idea de callejones y los paisajes más emblemáticos en cada rincón
Buscamos que el proyecto sea una extensión de una reinterpretación contemporánea de un Pueblo Mágico, que fomente conexiones profundas con el contexto y lo local. Además, buscamos que tenga un impacto ambiental y social positivo estableciendo un vínculo con el municipio: creando empleo, brindando seguridad y comunicando e intercambiando ideas con las zonas vecinas.
La raíz de este proyecto, y la vida del mismo, son los mecenas. Los usuarios viven en una comunidad de 12 casas conectadas por un parque lineal, que promueve actividades al aire libre y la construcción de relaciones. Además, el diseño permite privacidad en cada casa a través de fachadas frontales ciegas que dan a los terrenos comunes y fachadas interiores que dan paso a jardines y patios privados.
Queremos que este proyecto sea un ejemplo de comunidad entre las 12 casas, fomentando la colaboración y la unión, y convirtiendo este proyecto en un espacio versátil, atemporal y próspero. Buscamos que este lugar se convierta en una fuente de experiencias y un catalizador de felicidad para cada una de las personas que lo habitan: aquellos que, con el tiempo, crecerán hasta convertirse en amigos y familiares.
